jueves, 9 de diciembre de 2010

nuevas observaciones de estrellas en explosión,revelan pausas , parpadeos y llamaradas nunca vistas anteriormente.

Los astrónomos han trazado la luz creciente y menguante de las explosiones de estrellas, más cercanamente que nunca antes y han visto patrones que aún no han sido explicados por nuestra comprensión actual de cómo estas erupciones se producen.

Un equipo dirigido por Bernard Jackson, un físico solar del Centro de Astrofísica y Ciencias Espaciales de la Universidad de California en San Diego, desarrolló un instrumento que permitió al equipo hacer tales mediciones precisas.
El instrumentoSMEI (Solar Mass Ejection Imager), captura la luz de todo el cielo cada 102 minutos.

Utilizando datos del SMEI, el equipo estudió cuatro estrellas que explotaron tan violentamente que su luz habría sido visible sin telescopio y midieron su brillantez a lo largo de la explosión.


el SMEI está constituido por tres cámaras a bordo del satélite Coriolis lanzado en el 2003 , las cuales capturan el cielo entero cada 102 minutos.Credito: CASS/UC San Diego


imágen artística de RS Ophiuchi una de las estrellas medidas en este estudio.Credito: David Hardy, STFC.


Tres de las estrellas, o novas, se demoraron antes de alcanzar su pico de luminosidad , y todas parpadearon o destellaron cuando las explosiones siguieron su curso, según informan en The Astrophysical Journal.


Debido a que la luz de las estrellas es una distracción para el equipo de Jackson, el ruido se debe restar de sus datos para que puedan centrarse en la corona exterior y la heliosfera de la estrella , así ellos hacen detallados mapas de la luz estelar, incluyendo su brillo.


los astrónomos siguieron las explosiones encontradas en un mapa de luz de todo el cielo.Credito: James Tappin, University of Birmingham, UK.


En los mapas Rebeca Hounsell una estudiante graduada en la Universidad John Moores de Liverpool, en Gran Bretaña quien estuvo de visita en la Universidad de California de San Diego, identificó las cuatro novas tras encontrar puntos de luz que rápidamente se iluminaron y atenuaron en el transcurso de días.

Otros astrónomos habían observado anteriormente una pausa en el brillo de las novas, o "pausa antes del máximo", pero otros pensaban que era una anomalía. La precisa escala de tiempo y repetidas observaciones de este estudio lo confirman, según dicen los autores.

"La realidad de esta pausa que se encuentra en las tres novas de rápido descenso observadas es un desafío a los modelos detallados de la explosión de nova", dijo uno de los autores, el astrofísico Mike Bode, de la Universidad John Moores en Liverpool .

Dos equipos independientes de teóricos ya han comenzado a refinar sus modelos de cómo las novas explotan en respuesta.

Los astrónomos suelen caracterizar a la luz cambiante de las novas con curvas que suavemente se adecuan a las más esporádicas observaciones, pero el ritmo rápido del instrumento SMEI capturó el centelleo que no se había observado antes. Todas parpadeaban cuando su luz disminuia y una nova, la más lenta de las cuatro en atenuarse, emitió destellos dos veces después de alcanzar su pico de luminosidad.

Estas novas son estrellas enanas blancas que roban material, en forma de hidrógeno, de una estrella compañera, a menudo una envejecida y expandida gigante roja. Cuando el hidrógeno se acumula la gravedad de la enana blanca lo atrae y condensa hasta que se inflama, lo que desencadena una reacción de fusión nuclear fuera de control.


El equipo especula que las llamaradas post-pico pueden corresponder a cambios en la dinámica de esa reacción que todavía necesitan ser explicados.

"Antes de que Hounsell mirara a través de estos datos, la mayoría de las novas, sólo se observaban cuando alcanzaban su pico de luminosidad . Las imágenes uniformemente expuestas del instrumento nos permiten seguir la evolución completa de estas explosiones, cuando ellas brillan y se debilitan", dijo Jackson de la UC en San Diego.

Los datos del SMEI , el cual ha estado en funcionamiento a bordo del satélite Coriolis desde enero del 2003, permite a los astrónomos medir las novas que anteriormente se perdian.

"Incluso hoy en día las novas son principalmente descubiertas por los astrónomos aficionados de todo el mundo quienes entonces alertan a sus colegas profesionales para llevar a cabo observaciones", dijo Hounsell.

Hasta cinco novas lo suficientemente brillante para ser detectadas por el SMEI explotan en nuestra galaxia cada año, Allen Shafter, profesor de astronomía en la Universidad de San Diego y uno de los co-autores del informe han estimado que anteriormente, más de la mitad hubieran desaparecido sin ser detectadas.

"El SMEI asegura que las novas más brillantes y de más rápida evolución - las que brillan y luego se desvanecen en pocos días - no se pasen por alto", dijo Shafter "La alta resolución temporal de estas observaciones ha abierto una nueva ventana en el estudio de. Las novas en nuestra galaxia. "





fuente de la información:



http://www.universityofcalifornia.edu/news/article/24631